viernes, 5 de septiembre de 2008

Mucha chamba

Como os habreis dado cuenta el ritmo de entradas en el blog ha disminuido un poco... eso se debe a que no hemos parado, mucha chamba, que significa trabajo.



Por un lado sigo con los talleres tanto para las usuarias como para las promotoras ......





......... las reuniones





y, por otro lado, estamos capacitando a las que serán las nuevas promotoras de la casa de acogida.

Además durante la semana anterior estuve conociendo otras casas de acogidas para mujeres víctimas de violencia de género, pues me parecía importante conocer otras realidades. Es abismal las diferencias entre la casa "Rosa Lluncor" y las otras que puede visitar.

En primer lugar, observé que esas casas cuentan con una falta de recursos tanto humanos como materiales. Además, durante la estancia no se fomenta la autonomía e independencia de las usuarias de modo que, al salir, puedan rehacer sus vidas sin depender económicamente de alguien. Me sorprendió cómo está permitido que el agresor acuda a la casa aún conociendo que ha ejercido como proxeneta de la usuaria.

También estuve en un albergue donde se brinda gratuitamente alojamiento y comida a mujeres con sus hijos/as en caso de abandono, mujeres embarazadas, violencia de género y por motivos de salud. Está dirigido por un sacerdote y, aunque se acogen a mujeres siguen otras religiones, su orientación es claramente religiosa. El hogar cuenta con instalaciones enormes muy cuidadas y mucho espacio exterior para el jardín (todo ello obtenido de donaciones). Está como encargada una trabajadora social, que me explicó muy amablemente el funcionamiento del albergue, y acude una vez a la semana una psicóloga del MINDES (Ministerio de la Mujer y Desarrollo Social); es decir, cuenta con pocos recursos a nivel profesional.


Las casas de acogida no cuentan con ayudas económicas del MINDES, dependen de particulares, ongs u otras organizaciones; aún cuando esta institución se apropia de la casa Rosa Lluncor y la pone como ejemplo de sus buenas prácticas. El gobierno tan sólo apoya a algunas de estas aportando únicamente alimentos -a veces en no muy buen estado- através del PRONAA (Programa Nacional de Asistencia Alimentaria). He de decir también, que actualmente de todas las casas de acogida registradas tan sólo unas pocas cumplen con su función de dar acogida a las mujeres víctimas de violencia.

Para más información:
http://www.pronaa.gob.pe/
http://www.mimdes.gob.pe/


Saludos. María

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ojalá la experiencia sirva para poder difundir por estas tierras tan lejanas que la casa de acogida rosa lluncor necesita y merece apoyos.
Un abrazo
Belisa